Si
estás leyendo esta entrada seguro que ya eres adicto al ELE o lo eres
potencialmente. Pero,
¿qué significa exactamente tener adicción al ELE? ¿Es algo negativo?
Según
la RAE en su primera acepción, una
adicción es una “dependencia de sustancias o actividades nocivas para la salud o el equilibrio psíquico"
y en la segunda, “afición extrema a alguien o algo".
Atendiendo a la segunda definición, ¿crees que eres adict@
al ELE? Marca las frases con las que te sientes identificad@ para descubrirlo.
- Tienes una afición extrema por leer, investigar, asistir a webinarios, congresos y jornadas para profesores de ELE.
- Escuchas una canción, una entrevista o una conversación en la calle o en el metro y piensas: esto es una mina para mi clase.
- Ves una película, un corto, una serie o un tráiler y se te ocurren mil y una ideas para trabajar este o aquel contenido lingüístico, pragmático o sociocultural.
- Vas a una exposición y te llevas más folletos de los que sería normal pensando que te pueden servir para contextualizar o practicar en clase.
- No te vale con tener un estuche con un lápiz, un boli rojo y otro azul. Necesitas mucho más espacio para tus rotuladores, tijeras, celo, clips,…
- Entras en una papelería, librería o tienda similar y sales con muchas bolsas y llen@ de creatividad.
- Ves una nueva aplicación de móvil y ya le estás buscando una utilidad pedagógica.
- Tienes que ir constantemente a recalentar tu té o café porque se te ha enfriado buscando inspiración para tus clases en Pinterest, Instagram, Facebook, Twitter,…
Si has marcado más de 5…
¡Bienvenid@ al club! Este es tu cerebro:
Si además, y siguiendo la primera
acepción de la RAE, esta actividad te parece nociva para la salud (tienes ojeras por
dormir poco preparando tus clases, estás cansado al final de la semana o no
comes bien por no tener tiempo) o tu equilibrio psíquico (te pone de los
nervios ver faltas de ortografía o que tus estudiantes
digan frases como “Yo soy de turco”), entonces quizá empecemos a necesitar
terapia de grupo… ¡Nos lo íbamos a pasar de rechupELE!
Por cierto, ¿se te ocurren más
causas de nuestra adicción que añadir a la lista?
¡Me ha encantado! Definitivamente me identifico con lo expuesto en el post. Soy un eleadicto. Cuando empeccéis a organizar las terapias avisadme :)
ResponderEliminarGracias Jorge, yo creo que allá para cuando terminemos el Máster sería una buena fecha :)
EliminarMe apunto a la terapia, Dolores. ;)
ResponderEliminarJaja! Genial. Mientras empezamos, recuerda preguntarte en la caja de una tienda Tiger o una papelería "¿de verdad necesito una caja más de dados, cinco rotuladores de purpurina y esas cartulinas tan baratitas?" :)
EliminarDolores, creo que tenemos muchas cosas en común. ;)
EliminarYo lo necesito todo ;) ¡Qué peligro tengo en un Tiger!
ResponderEliminarMuy divertida la reflexión sobre nuestra deformación profesional.
Un abrazo,
Ocarina
Ja, ja, ja. Muy simpática tu reflexión Dolores. Quizás yo ya he pasado por varios periodos de adicción en mi vida, así que te entiendo perfectamente, pero ahora que llevo tres años en la enseñanza de ELE me tomo las cosas con más calma. Ánimo con esa "adicción". Un abrazo, Antonio.
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